El comerciante Lucas Bonilla, conocido como ‘Frío’, fue condenado a nueve años de prisión por el Tribunal Oral Federal N°1 de Salta. Se lo halló culpable de ordenar el transporte de 136 kilos de cocaína mezclada con azúcar.
El caso es uno de los más relevantes en la lucha contra el narcotráfico en el norte argentino, y la sentencia marca un precedente en la persecución de delitos complejos.